Pero nuestros sistemas de contracorriente no solo son más económicos que otros productos comparables. Las turbinas también consumen menos electricidad que los electrodomésticos habituales. Por ejemplo, si se calcula la energía necesaria para media hora de entrenamiento de natación con un HydroStar BGA 160 al máximo nivel, el resultado es de 0,435 kWh. A un precio de 37 céntimos por kilovatio/hora, los costes eléctricos ascienden a unos 16 céntimos.
En cambio, un horno promedio consume alrededor de 1 kWh en media hora (modo convección), lo que supone un consumo de energía de más del doble. Esto es casi un dilema, ya que si preparamos pasta al horno con queso gratinado, a las calorías de la comida debemos sumarles el consumo energético del horno, es decir, unas 380 kcal. ¿Ahorrar energía nadando o mejor comer pasta? En este caso, le aconsejamos que no sea tan duro consigo mismo: ambas cosas son buenas y aportan felicidad. Además, si entrena con el HydroStar, ya sea antes o después de la comida al horno, al final seguro que sus niveles individuales de energía quedarán equilibrados.
Por cierto: no solo el horno genera unos costes de electricidad considerablemente más altos que nuestros sistemas de contracorriente: una tostadora (0,6 kWh/22 céntimos), una cafetera (0,6 kWh/22 céntimos) y una plancha (0,5 kWh/19 céntimos) también requieren más energía por media hora.